miércoles, 31 de julio de 2019

Dame tiempo.

La gente ya no me entiende cuando hablo de ti. Es normal, después de e tanto tiempo deben preguntarse cómo es posible que siga igual. Nadie me creyó cuando dije que a ti te querría siempre, ni siquiera tú lo hiciste y mírame.

Casi siete años se ha alargado está historia y no entiendo cómo, tampoco por qué. ¿Cómo se alarga una historia de dos personas que no se quieren de la misma forma? De verdad, no lo entiendo. Quizá ya ha llegado el momento de paralizar todo esto, de dejarlo como está y ya veremos qué pasará con todo esto. Igual se desvanece como si nada o igual vuelve a encontrarnos en un par de años cuando volvamos a vernos y creamos que todo se acabó por fin. No lo sé, hace mucho tiempo que no tengo ni idea de nada que tenga que ver con nosotros. Ya no te entiendo y ya no sé si tú a mí sí.

Ahora me pides tiempo y yo me pregunto si es que no han sido suficientes estos siete años. ¿Qué tienes que pensar ahora que no hayas pensado antes? Dime qué es lo que tengo que hacer yo ahora, qué es lo que tengo que esperar después de todo este tiempo. ¿Acaso vas a venir a decirme algo que no haya escuchado hasta ahora? ¿Vas a venir a decirme que no quieres perderme, que en el fondo hay una parte de ti que sí me quiere? Los dos sabemos que no, así que dime qué hago dándote tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario